El día siguiente desayunamos en el hostal y nos fuimos directos a Lone Pine, el santuario de los koalas cuya entrada cuesta 33 dolares. Es un gasto que teníamos planeado, Perrine no podía irse de Australia sin ver a un koala asi que hacia allí nos dirigimos, se puede ir en tren o en autobús, nosotros escogimos el autobús y sale unos 6 dolares la ida por persona, el viaje son unos 40 minutos. Lone Pine es el santuario de los koalas pero también es un zoo donde tienen toda la fauna que hay por el país, animales curiosos como el Ornitorinco que se puede encontrar en libertad en el parque natural Eungella, parque que queda a unas 2 horas de Mackay pero al que no pudimos ir. Hay una zona de canguros que andan a sus anchas y a los cuales les puedes tocar y dar de comer, nos sacamos mil fotos con ellos, estos del santuario son muy dóciles y se dejan tocar, están muy acostumbrados a ver a gente. Aparte esta el famoso diablo de Tasmaniaaunque este estaba durmiendo, también todo tipo de pájaros del país, a muchos ya los vimos en libertad.
Para ver koalas hay por todos lugares en el santuario, los tienen sin rejas y se pueden ver muy bien. La mayor parte de su tiempo lo dedican a dormir (dicen que hasta 20 horas) y cuando estan despiertos lo dedican a comer hojas, esa es su vida. No contentos con verlo nos hicimos una foto con un koala en brazos, Perrine lo cogia pero yo tambien podia estar en la foto, el precio fue de 16 dolares aunque si das tu camara tambien te pueden hacer fotos con ella o incluso hacerlas tu, es como coger un peluche suave pero pesado, toda una experiencia poder haber echo eso. Es un poco circo para turistas y los animales son un poco usados para ganar dinero pero la ocasión de tener un animal así en brazos es única y es algo para recordar toda tu vida, mereció mucho la pena.
Terminamos a eso de medio dia asi que nos quedaba tiempo para ver mas de Brisbane ciudad, con la ayuda de la lonely planet hicimos un itinerario que recomiendan en el que vimos los edificios mas representativos y bonitos de la ciudad. El centro es muy acogedor con tiendas por todos sitios como en la Queen street y su gigante centro comercial. Parecerá raro pero me estaba gustando mas que Sydney, Brisbane parece que tiene mas que ver, mas edificios bonitos y zonas interesantes. Para gusto los colores.
Empezamos por King George Squaredonde había un escenario y mucho ambiente navideño, en esta plaza también se encuentra el City Hall. Era un par de días antes del día de nochebuena y toda la ciudad estaba vestida de Papa Noel. En esta plaza se puede ver una iglesia rodeada de rascacielos, una imagen curiosa que dice mucho de lo que esta creciendo esta ciudad. Pasando por la animada Albert street vimos el bonito edificio de Comissariat Store Building construido en el 1829 y que actualmente lo utiliza el gobierno, edificio que forma parte de la historia de Brisbane. Desde allí cruzamos el Victoria Bridgepara llegar al Queensland Museum y el Queensland Art Gallery a los cuales pasamos de largo por falta de tiempo, la entrada a la mayoría de museos de Brisbane es gratuita.
Desde alli se empieza un bonito paseo pegado al rio que merece mucho la pena y por donde te encuentras el Queensland Art Gallery , una noria al estilo London Eye también el South Bank Parkslands muy bonito y también tienes para poder bañarte en una piscina gratis en su lagoon, no lo hicimos porque no llevábamos bañador pero tenia buena pinta. Hay mucho ambiente con el mercadillo y con los bares que hay por allí. Mucha gente con gorro de navidad y probablemente cenas de empresa de navidad que llenaban todos sus bares y restaurantes. Volvimos a la parte mas centrica por el Goodwill Bridgede donde se tienen buenas vistas del skyline de Brisbane. Pasamos por su muy bonito Botanic Gardens donde están los pájaros feos y raros que vimos en Sydney y muchisima variedad de arboles gigantes y flores.
Por el camino también pasamos por el Old Goverment House y el Parliament House. Por el otro lado del centro pegado al río hay un paseo muy bonito por donde se ven a barcos-restaurantes y mucho lujo. Llegamos hasta la Customs Houseedificio del siglo 19 en el que se pueden ver actuaciones de arte. Volvimos al centro de Brisbane donde vimos otras varias plazas con edificios y estatuas.
El día siguiente era uno de los días mas emocionantes del viaje, cogíamos nuestro vuelo a Nueva Zelanda. Muchas ganas e ilusión era lo que sentiamos en ese momento aunque antes aprovechamos para visitar un poco mas de Brisbane y como no podia ser de otra forma fuimos a visitar su barrio chino que aunque no es tan especial si que tiene muchos sitios para comer bien y barato.Los olores y caras de las personas cambian en esta zona de Brisbane donde todo es mas intercultural y donde lo tienes crudo para elegir lo que vas a comer, al final comimos comida filipina que todavía no conocíamos bien, es raro porque entendía muchas palabras de sus platos como por ejemplo 'adobo' quien sabe si acabaremos en este país después de Nueva Zelanda, eso esta por ver, pero lo que si sabemos es que le tenemos muchas ganas. Por este barrio de Brisbane parece que también es donde hay parte de marcha con bares para irte de cervezeo y alguna discoteca aunque a estas horas estaban todas cerradas, lógicamente.
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